Por fin llega la primera misión. Después de las convivencias que tuvimos estábamos todos deseando poner en practica todo lo comentado ese fin de semana.
Domingo 10,30 de la mañana, nos reunimos todos en la parroquia de Sta. María Josefa del corazón de Jesús, en el ensanche de Vallecas (la parroquia de nuestro queridísimo padre Paco). Esperamos a que llegaran los más dormilones y nos metimos en la iglesia a hacer un ratito de oración para poner todo en manos de Dios y de la Virgen.
Después de la oración nos pusimos a preparar todo. Como buen equipo nos dividimos las tareas. Los del coro se pusieron a ensayar las canciones de misa mientras que el resto preparamos los juegos que íbamos a hacer con los niños.
En misa tuvimos la gran idea de sentarnos todos los de Caridad y Misión juntos en primera y segunda fila, cual sardinas en lata. Alguno optó por sentarse en el suelo. Tengo que añadir que había más sitio en la iglesia pero… !somos un equipo!
Después de misa salimos fuera en busca de los niños. Para nuestro asombro, había un montón. A más de uno se nos puso una sonrisita en la cara. Eran tantos que los dividimos en tres grupos. Hicimos tres juegos, cada uno con su moraleja: cangrejo (escuchar en la oración del rosario, evitar ruido), muralla (defensa, cuando rezamos el rosario somos guardianes de la virgen en la tierra) y el dragón (la cabeza y la cola reflejan la distancia larga de nosotros con Dios y cuanto menos rezamos con nuestra madre menos cerca estamos de Él).

Después Carol y Car les dieron una pequeña catequesis a los niños sobre el mes de octubre, el mes del rosario. Alguno que otro estaba un poco despistadillo pero no pasa nada porque nosotros somos meros instrumentos de Dios. «Seguid plantando que yo cogeré los frutos».

