El pasado 28 de septiembre, comenzó el curso con las Montañeras Pequeñas del Mater Salvatoris por fin retomamos las excursiones después del largo verano y por supuesto todas con las pilas cargadas. Tanto las de 6º como las 1º de la ESO acompañadas en todo momento de sus antiguas y nuevas jefas, estábamos todas emocionadas por el gran día que nos esperaba y el tiempo tan bueno que Jesús y la Virgen nos habían preparado. Todas estábamos dispuestas a disfrutar muchísimo y a dar lo mejor de nosotras mismas como buenas montañeras.
Comenzamos a caminar desde el puerto de Navacerrada hacía Peña del Águila; nuestra primera cima del curso a conquistar; situada en la Sierra de Guadarrama, Madrid. Para iniciar el día lo primero y más importante era el ofrecimiento el cual hicimos con mucho cariño y en formación por orden de patrullas, las cuales ya estaban organizadas con anterioridad. ¿Estáis preparadas? Comienza el día tan esperado, pondremos todo en manos de Jesús y de María y con unos puntos de nuestras jefas y un poco de silencio para agradecer y ofrecer el día.
Íbamos poco a poco cogiendo el ritmo subiendo, subiendo no teníamos prisa todas nos animábamos las unas a las otras, nos ayudábamos, cantábamos, nos reíamos, observábamos la naturaleza; todo lo que nos rodeaba, y claro, también nos dimos cuenta que el Señor nos había puesto hoy allí a cada una de nosotras y que teníamos muchísima suerte y eso lo teníamos que aprovechar.
Llegamos a la primera parada; la Bola del Mundo allí tomamos un aperitivo, nos contaron un poquito sobre dónde íbamos y donde estábamos fue muy interesante ya que aprendimos muchísimo y para finalizar su explicación hicimos una sopa de letras divertidísima y jugamos con nuestras patrullas y nos ayudamos muchísimo entre nosotras.
Seguimos andando, y ya quedaba poquísimo, por lo que llegamos enseguida. Una vez allí nos encontramos con nuestra esperada cima y la coronamos ¿Cómo lo hicimos? Con nuestro himno y el silencio de cumbres el cual pudimos aprovechar debido al cielo tan despejado y a los paisajes increíbles que nos rodeaban. En el silencio de cumbres agradecimos muchísimo a Jesús por todo lo que nos había dado a cada una de nosotras.

Seguidamente llego el momento de comer, descansar un poco y de jugar. Los juegos eran geniales, además todas jugábamos con todas, nos mezclamos para hacer nuevas amigas. Tras un gran rato de juegos y risas llego el momento de la bajada, dirección a la Bola del mundo, donde íbamos a tener la RxP (reunión por patrulla). Este año, aprenderemos más de nuestro himno desmenuzándolo a lo largo de las reuniones, para así conocer su verdadero sentido.
A continuación llegó el momento de encontrarnos con todos los Montañeros Mater Salvatoris, desde pequeñas hasta mayores con los chicos incluidos. Es impresionante ver los muchos que somos, y todos con un mismo fin, dando gracias por todo el día y recibiendo al Señor con mucha ilusión y unas vistas alucinantes.

El fin llego tras la Eucaristía, comenzamos nosotras a bajar las primeras por orden de marcha y dedicándoselo a la Virgen con el Santo Rosario, todas emocionadas, porque todas pudimos participar llevando el Rosario y cantándole canciones a la Virgen que sabemos que le encantan. Al llegar a Navacerrada volvimos a coincidir con todos los montañeros puesto que todos cogíamos el bus en el mismo sitio para volver a casa con nuestras familias.
Jerez, pañoleta azul.

